Peligra vida de Leonardo a sus cinco años; piden ayuda a Cuitláhuac
Juan David Castilla Arcos/Xalapa.- Leonardo Daniel, de cinco años, lucha contra un virus que invadió su cerebro, pero sus padres carecen de recursos para su atención médica.
El niño padece encefalitis viral, enfermedad detectada luego de complicaciones en su salud durante sus primeros años de vida.
Cuando tenía 4 años, el 23 de octubre del 2019, entró a terapia intensiva por crisis convulsiva durante tres días y luego entró en coma.
En diciembre pasado, los médicos lo dieron de alta y, en enero, inició su tratamiento con especialistas y terapeutas; sin embargo, solo accedió a dicha atención durante dos meses, pues la pandemia del SARS-COV-2 (COVID-19) ocasionó la suspensión toda actividad clínica que ayudaba a su salud.
Su madre Karen Hernández Alonso recuerda que las consultas fueron suspendidas en el Centro de Alta Especialidad “Doctor Rafael Lucio”, así como también, las terapias en el Centro de Rehabilitación e integración Social de Veracruz (Crisver), con sede en Xalapa.
El menor estuvo sin su tratamiento durante cuatro meses, tiempo que ha durado la contingencia sanitaria, situación que le provocó nuevamente convulsiones hasta que perdió el conocimiento.
“Él requiere terapias y tratamiento, nosotros en vista de que empezó la pandemia y llegó el virus, sus consultas en el CAE se cancelaron y ya no lo volvió a ver el especialista, nos lo estaban dejando morir”.
La mamá del niño comenta que tuvieron que recurrir a un doctor particular del Hospital Los Ángeles en Xalapa, con un nuevo tratamiento y medicamento.
En ese lugar, la familia tiene que pagar ocho mil pesos por semana; el médico que lo ha atendido no ha cobrado sus honorarios, pero recomendó que acudieran al CAE para que la atención fuese gratuita.
En dicho hospital público, el médico Gustavo Hernández, neurólogo pediatra, quien lo trató desde pequeño, rechazó a atención a Leonardo.
“El doctor me dijo que si no encontraba el medicamento en el hospital lo buscara, haga lo que sea hasta que lo encuentre, pero conmigo no hay consulta, yo no lo voy a atender, me dijo”, relata Hernández Alonso.
El niño también requiere una operación para tratar un problema en sus testículos, que podría derivar en cáncer. “Si no se me muere por convulsiones se me muere por cáncer. A él faltándole un medicamento empieza sus crisis convulsivas, el convulsionar para él es dañarle el cerebro. Yo vendo postres, pasteles, vendo cosas por catálogo, hacemos rifas de lo que nos han donado, hacemos de todo para solventar el tratamiento de las crisis convulsivas, solo nos falta el apoyo para la operación”.
Los padres del menor están desesperados, están dispuestos a hacer lo que sea para salvar la vida de su pequeño.
Por tal motivo, pidieron ayuda al titular de la Secretaría de Salud de Veracruz, Roberto Ramos Alor, y al gobernador Cuitláhuac García Jiménez.
Además, la mamá puso a disposición el número celular 2281219618, para recibir ayuda de la población en general.